Ni Dios, ni el Diablo
Después de enterarnos que Piñón Fijo y Miranda son los máximos exponentes del demonio, nuestra realidad y la resolución de los temas centrales en nuestra sociedad por fin pueden solucionarse.
Detrás de esa imagen homosexual, los amigos de “Lolo”, esconden un fuerte poder espiritual. Se podría afirmar que se trata de un poder tan supremo como maligno.
Algunos grupos religiosos de Estados Unidos señalan como el culpable de todos los males de sus hijos al cantante Marilyn Manson. De imagen oscura, casi asexuado, su música presenta una actitud desafiante y transgresora.
Ha llegado la hora de aprender de sociedades más avanzadas. Los norteamericanos no ven como una amenaza a los Backstreet Boys. ¿Por qué acusamos a Miranda entonces?. ¿No hay un personaje más diabólico?. ¿O por lo menos un poco más varonil, más duro?.
Lo único que logramos con esta sentencia es enfurecer más al Diablo. Subestimarlo. Creer que elige sus representantes en la tierra sin ocuparse de escuchar sus discos. Sin diseñar sus atuendos.
El caso de Piñón es por lo menos más discutible. El payaso no sólo hace sonar un caño plástico como si fuera un saxo, sino que además habla con una cabra. Y lo más grave es que esta le responde.
Antes podía señalarse a Charly García como el anti Cristo. Pero teniendo en cuenta que a pesar de la vida que ah llevado aún continúa haciendo de las suyas y que además pudo volar varios metros saltando desde un séptimo piso, más bien estaríamos hablando de un milagro.
Xuxa fue otra acusada de componer canciones con mensajes diabólicos. Estos, según los entendidos, podían escucharse dando vueltas sus cintas. Como acusación no esta tan lejos de la realidad y hasta suscribo a esta teoría. Pero no era necesario dar vuelta la cinta para saber que se trataba de una composición de Satán o quizás de un intérprete aún más mediocre.
Convengamos que es difícil determinar que tan desarrollado musicalmente esta el Diablo. Sabemos de sus aptitudes para ingresar dentro de una persona, de su gusto por el vómito verde y su repulsión por la gente honesta. Aunque no podríamos afirmar que estas características lo hicieran un mal compositor. No sabemos si Beethoven o Bach estaban más cerca del cielo de lo que lo esta él.
Al hablar de Dios uno imagina un hombre lleno de virtudes, solidario, lleno de amor y de gracia. Aunque su música deja mucho que desear. No sabemos si el fue el interprete de las canciones eclesiásticas o quizás le sucedió lo mismo que a muchos músicos, que después de firmar con una discográfica son obligados a interpretar temas poco felices.
Ni Dios ni el Diablo. Esa es mi elección. ¿Qué puede ser lo intermedio?. Voy a pensarlo. Pero en silencio, no quiero verme influenciado por la música.
Detrás de esa imagen homosexual, los amigos de “Lolo”, esconden un fuerte poder espiritual. Se podría afirmar que se trata de un poder tan supremo como maligno.
Algunos grupos religiosos de Estados Unidos señalan como el culpable de todos los males de sus hijos al cantante Marilyn Manson. De imagen oscura, casi asexuado, su música presenta una actitud desafiante y transgresora.
Ha llegado la hora de aprender de sociedades más avanzadas. Los norteamericanos no ven como una amenaza a los Backstreet Boys. ¿Por qué acusamos a Miranda entonces?. ¿No hay un personaje más diabólico?. ¿O por lo menos un poco más varonil, más duro?.
Lo único que logramos con esta sentencia es enfurecer más al Diablo. Subestimarlo. Creer que elige sus representantes en la tierra sin ocuparse de escuchar sus discos. Sin diseñar sus atuendos.
El caso de Piñón es por lo menos más discutible. El payaso no sólo hace sonar un caño plástico como si fuera un saxo, sino que además habla con una cabra. Y lo más grave es que esta le responde.
Antes podía señalarse a Charly García como el anti Cristo. Pero teniendo en cuenta que a pesar de la vida que ah llevado aún continúa haciendo de las suyas y que además pudo volar varios metros saltando desde un séptimo piso, más bien estaríamos hablando de un milagro.
Xuxa fue otra acusada de componer canciones con mensajes diabólicos. Estos, según los entendidos, podían escucharse dando vueltas sus cintas. Como acusación no esta tan lejos de la realidad y hasta suscribo a esta teoría. Pero no era necesario dar vuelta la cinta para saber que se trataba de una composición de Satán o quizás de un intérprete aún más mediocre.
Convengamos que es difícil determinar que tan desarrollado musicalmente esta el Diablo. Sabemos de sus aptitudes para ingresar dentro de una persona, de su gusto por el vómito verde y su repulsión por la gente honesta. Aunque no podríamos afirmar que estas características lo hicieran un mal compositor. No sabemos si Beethoven o Bach estaban más cerca del cielo de lo que lo esta él.
Al hablar de Dios uno imagina un hombre lleno de virtudes, solidario, lleno de amor y de gracia. Aunque su música deja mucho que desear. No sabemos si el fue el interprete de las canciones eclesiásticas o quizás le sucedió lo mismo que a muchos músicos, que después de firmar con una discográfica son obligados a interpretar temas poco felices.
Ni Dios ni el Diablo. Esa es mi elección. ¿Qué puede ser lo intermedio?. Voy a pensarlo. Pero en silencio, no quiero verme influenciado por la música.
July Armas
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